El ácido hialurónico, aunque es un potente hidratante para la piel, es una molécula muy grande que, incluso cuando se administra por vía tópica en forma fragmentada, sigue siendo demasiado grande para penetrar en la piel y lograr una transformación significativa del volumen. Cuando se inyectan, estos rellenos llenan el espacio y absorben el agua para restaurar temporalmente el volumen facial y suavizar los pliegues. Las zonas más comunes del rostro para las inyecciones de ácido hialurónico, también conocidas como rellenos dérmicos, incluyen los pliegues nasolabiales (paréntesis alrededor de la boca o líneas de la risa), las líneas de marioneta (líneas desde las comisuras de la boca hasta la barbilla), la línea de la mandíbula, los labios, las mejillas o debajo de los ojos. Mientras que los resultados de las inyecciones de ácido hialurónico son inmediatos y pueden durar entre 3 y 12 meses, el ácido hialurónico es absorbido naturalmente por el cuerpo. Por ello, es necesario repetir las inyecciones para mantener los resultados. Para encontrar un profesional certificado para las inyecciones de ácido hialurónico, visita el localizador de profesionales del cuidado de la piel SkinCeuticals.
La aplicación tópica de fórmulas de ácido hialurónico es la piedra angular de una rutina eficaz de cuidado de la piel en el hogar. Aumentan la hidratación de la superficie y, en función de la formulación del producto, pueden dar lugar a una textura de la piel más suave y tersa y a una mejora del aspecto en cuanto a volumen y firmeza, lo que los convierte en un complemento ideal para las inyecciones de ácido hialurónico en el consultorio.